Luz Silenciosa (2007)

Luz Silenciosa
De: Carlos Reygadas
México-Francia, 2007
Festival de Nueva York
100/100

Nos había cautivado con sus obras anteriores, Stellet Licht es la consolidación de Carlos Reygadas, el director visionario del cine Mexicano. Siempre es difícil empezar a analizar esa cinta que se introduce a las entrañas y deja a un cuerpo sin palabras, durante la cinta no haces más que dejarte llevar por un luminoso orgasmo cinematográfico. Se prenden las luces de la sala y me encuentro sin opinión, trato de por lo menos darle una calificación para los visitantes del blog que esperan mi impresión sobre la cinta, intento escribir esa combinación de estrellitas adecuada una y otra vez y me doy cuenta que mi mente necesita procesar tal visión. Ese mismo día veo otras dos películas, y me doy cuenta que una fuerza cósmica interfiere en todo instante, en ese momento me doy cuenta que el maestro y mi tocayo casi hasta de apellido, logro encender una pequeña flama dentro de mi, algo que solo habían logrado encender recientemente David Lynch (Mulholland Dr, 2001), Lars Von Trier (Dogville, 2003) y Terrence Malick (The New World, 2005).

La inquietante obra germina un delicioso relato de adulterio que cuestiona la fe y la propia existencia de un dios o el mismo diablo. Presentado en una forma sutil, pero que en momentos logra el efecto voyeurista, tal vez no en su significado carnal, pero si en alma y aliento.

Mucho se ha hablado sobre la escena inaugural de la película, y no es por ser repetitivo pero inevitable el no analizar una de las secuencias cinematográficas mas sublimes en la historia del cine. Reygadas nos presenta un amanecer que estremece a cualquier persona y es percibido como una inadvertida ofrenda visual y sonora. Empezamos en silencio con un cielo borroso, después escuchamos grillos, sonido que efectúan no para molestara los humanos si no para atraer a sus hembras, posteriormente pájaros, y animales de granja que parecen corear ha algo que viene, le dan la bienvenida a la luz, y sin darnos cuenta estamos sumisos a un renacer, un brillo de luz en el horizonte que celebra un nuevo día, son los primeros ofrecimientos del rey sol, lentamente vemos un amanecer que bien pudiera ser visto como la misma creación bíblica. Es en este momento en que la flama en mi abrasa inquietantemente.

Después de casi seis minutos de genialidad desnuda, nos adentramos al conflictivo mundo de Johan, un hombre en conflicto y que al igual que Marcos en Batalla en el Cielo (2005), enfrenta una lucha interna. Un hombre casado, lleno de fe, no logra entender la razón de su conducta adultera, se ha enamorado de otra mujer, se pregunta si será “cosa del enemigo” o una intervención divina. Durante el almuerzo, Johan y su familia dan gracias al creador para después continuar con este día, Johan se encuentra solo, y se quiebra en llanto, la batalla interna es desgarrante y eventualmente razona, no es una travesura del chamuco, tampoco una prueba de Dios.

La narrativa es elegante y firme, y el trabajo actoral regresa a lo logrado en Japón. El Chihuahuense Cornelio Wall conmueve y los niños son filmados con nobleza. Técnicamente la cinta revoluciona, en especial en su fotografía y diseño sonoro. Hace unos meses al saber que Diego Vignatti no seria el cinematógrafo, dude un poco de la capacidad de Alexis Zabe. Si bien logro proyectarse captando la maravillosa Temporada de Patos (Eimbcke, 2004), el cine de Reygadas excita y requiere agudeza. Es impactante el calibrar cantidades de hermosos paisajes, así como los amables encuadres usando solo luz natural. La fotografía en Luz Silenciosa se convierte en un monstruo celestial en una escena en la cual Johan luce su voz cantando la pegajosa y folklórica cancion “No Volveré” mientras da círculos en su camioneta, escena que nos recuerda que estamos en México y entonando corridos. Posteriormente caminamos junto a el y se reúne con su ‘amante’, además de el beso apasionado, logramos ver luces bailarinas alrededor de los enamorados, algo que algunos verán como un descuido pero que en realidad fue medido por su director y fotógrafo. Alexis Zabe supera las expectativas, el resultado concluye en uno de los mejores trabajos de los últimos años.

Si bien la historia es verbalmente tímida, el director nos obsequia los placeres visuales, desde campos verdes que manifiestan vida, hasta close ups a sus actores no profesionales que confirman la teoría de Bresson, “dejar que el cine transforme al personaje.” La cinta también sirve para documentar la cultura Menonita, Stellet Licht es la primera cinta de ficción en exteriorizar a una comunidad conservadora que emigro al norte de México en los años '20. La intervención documental funciona al no formularse en un rito enciclopédico o una contemplación de monumento a la cultura. Logramos conocer a esta familia en una forma sutil y honesta. El trabajo sonoro es brillante en mayúsculas, se apuesta por una ‘grabación especial’ de sonido en laescena inicial y su diseño se transforma durante toda la cinta. Es el trabajo colectivo de Sergio Díaz, Raúl Locateli y los experimentados Martín Hernández y Jaime Baksht.

Luz Silenciosa deslumbra audacia y sensibilidad. Sigue a un triangulo amoroso el cual además de Johan, tambien estan involucradas su esposa Esther y su amante Marianne. Esta ultima delibera cual fuerza es mas grande, la paz o el amor. Luz Silenciosa es cine generoso disponible a cualquiera que aborde el viaje. Japón nos llevo a la meditación de la muerte y el sacrificio de la existencia, Batalla en el Cielo entrego la reflexión trágica, sexual y política. Luz Silenciosa, la mejor cinta de Reygadas, ofrece un éxtasis fílmico sin igual.

Pasan los días y me doy cuenta que es flamita en mi se ha convertido en todo un centello luminoso.