Las 50, Segunda Parte: [40-31]

40. MATANDO CABOS Alejandro Lozano, 2004

Donde las propuestas comerciales deberían apuntar, sin tener una gran idea adquiere la virtud de la absurdidad, manipulándola y así convertirse en toda una comedia negra. Ideas robadas, ideas atadas, todas coordinando una comedia hilarante cuya única pretensión es divertir. Los guionistas (y protagonistas) Tony Dalton y Kristoff se avientan un guión bastante cursi, pero es también uno de los únicos que funcionan como apuesta popular. Técnicamente impecable, con ritmo apropiado y actuaciones memorables (Cosio & Palacios especialmente) Matando Cabos es una comedia obligatoria a pesar de que parece envejecer muy pronto.

39. TORO NEGRO Carlos Armella y Pedro González Rubio, 2000

Colorido filme de toreros, machistas, crueldad animal y los vicios. Cada escena es violenta, incluso las cómicas, el rojo esta presente en cada acción, no es una cinta fácil de digerir. La cámara nos avienta a la vida de un atrevido personaje con varios apodos pero especialmente llamado “El Negro” y “El Suicida”, un alcohólico quien literalmente pierde la vida cada vez que se enfrenta al animal con cuernos. Difícilmente se logra simpatizar con este individuo que carga consigo la violencia a todas partes, pero es innegable el maravilloso desempeño de los directores ante el devorador y perdido personaje.

38. ARO TOLBUKHIN Racine/Villaronga/Zimmermann

… en la mente del asesino. Pase por un dilema sobre considerarla mexicana, pues aunque es mayoritariamente financiada en México sus tres realizadores son extranjeros. Otorgarle un espacio en mi lista personal es adecuado, pues solo en México encontró un sitio. Aquella historia aterradora que combina el documental con la ficción, sobre un homicida húngaro refugiado en Guatemala culpable de prender en llamas a sus victimas que característicamente son mujeres embarazadas. Actuaciones esplendidas aunque contenidas de Daniel Giménez Cacho y Carmen Beato, entrevistas desalentadas y un segmento a blanco y negro inolvidable.

37. POR LA LIBRE Juan Carlos de Llaca, 2000

El encantador viaje de la primos que tendrán que llevar a su abuelo en su ultimo viaje, al mar de Acapulco donde prometieron esparcir sus cenizas. Antonio Armonía, guionista, es un escritor que toma la delantera en sus películas. Podrá ser una cinta de Llaca, Gruner o Silva, pero sus poderosos guiones sobre la muerte terminan conduciendo sus películas. Buen cine manejado por el escritor y no tanto por el director. Los primos que no se llevan muy b ien muestran el coraje y afecto que sus padres esconden egoístamente, eventualmente formando un vinculo familiar muy fuerte. Una historia divertida, recordemos al abuelo manoseado por tanta gente desconocida en el antro, o que tal como se lo dividen en partes iguales.

36. EN EL HOYO Juan Carlos Rulfo, 2006

El exitoso documental de Rulfo, sobre un grupo de trabajadores que van revelando poco a poco sus temores. El documentalista deja los problemas políticos para preocuparse en retratar y ofrecer un espacio a una fuerza laboral bastante olvidada. La construcción del segundo piso del periférico termina siendo un pretexto, pero aquella toma final que recorre la construcción por los cielos sugiere una admiración total hacia los responsables. Rulfo los retrata con amabilidad, pero sobre todo con respeto. La música de Leonardo Heiblum debe ser una de las mejores partituras de esta década.

35. AL OTRO LADO Natalia Almada, 2005

El documental que desmenuza los corridos, que dignamente estudia el tema de la inmigración y presenta una nueva generación de mexicanos en el norte. Apoyado por el canal educativo PBS, el documental es un encantador relato musical, aun para los que no gustamos de los controversiales y legalmente reducidos corridos. También es un afortunado estudio al limbo que es la frontera, la relación entre esta con el narcotráfico, y la transición del corrido al narco-corrido. Juntos acompañamos a un joven, creador de estas historias musicalizadas, el busca penetrar territorio estadounidense, hará de su experiencia una crónica y motivación para seguir componiendo.

34. EL GAVILAN DE LA SIERRA Juan Carlos de la Riva, 2000

Filmada en mi estado de Durango, trabajado con las tendencias del videohome pero dejándose de el reciclaje que caracteriza al genero. El aspirante músico que regresa a su tierra para investigar la muerte de su hermano, un bandido conquistador que simboliza la rebeldía ante la impunidad y represión. Entrañable aquel momento en que el músico le compone un corrido a su desparecido hermano. El filme se alimenta de la música, del campo, de lo tradicional, de la calidez norteña tan ninguneada en nuestro cine. Película que puede presumir de juntar la efectividad del cine de pueblo, el cine que se acerca su pueblo, muestra de eso es la sola presencia de Mario Almada, un icono dentro del cine mexicano popular.

33. ERENDIRA IKIKUNARI Juan Mora Catlett, 2007

Realizada en imágenes, codificada para ser contemplada como una artesanía casi pastoral. La fuerza en la feminidad mexicana reflejada en Erendira, la hermosa mujer desafiante que contra corriente y la ayuda de un caballo blanco hace una diferencia en su comunidad. Mora Catlett encuentra en códices una narrativa alternativa que se agradece, los pocos recursos de la cinta y las consecuencias de esto pasan a segundo renglón. Mora Catlett, el artesano, el que enternece su histórico cuento con maquillaje, vestuario, cartones y mascaras.

32. EL ESPINAZO DEL DIABLO Guillermo del Toro, 2001

El cine de fantasmas, la hermana mayor de El Laberinto del Fauno es una bella historia contada por los niños olvidados durante la guerra civil Española. Filme de genero pero políticamente guiado hacia el Santi, el fantasma que se quedo suspendido en el tiempo. Una final clasicista, desgarrador y persuasivo. De poder emocional, el cuento es enternecedor y mucho se debe al buen desempeño de los niños actores, y las formidables actuaciones de Marisa Paredes, Federico Luppi y el malvado Eduardo Noriega.

31. VER LLOVER Elisa Miller, 2007

En su simpleza y su ternura yacen sus mayores virtudes. El cortometraje ganador de la palma de oro cuenta el corto noviazgo de dos jóvenes, interpretados por Diego Cataño y Sofía Espinosa, su tentación carnal expuesta no en el acto sexual, pero presentándola en acciones pequeñas, que pudiesen verse insignificantes pero no son menos que sublimes. El corto inicia con los dos jóvenes tratando de cruzar al otro lado de la calle en la hora del trafico. El temor es grande, pero están concientes que esa travesía formara una relación aun mas sólida entre ellos. Se deja de dramas, expone la necesidad de la inmigración como una opción y no caricaturiza a sus jóvenes provincianos.